La prostatitis se define como microscópica inflamación de los tejidos prostáticas, que puede manifestarse por innumerables síntomas clínicos. Recientemente, los Institutos nacionales de salud (NIH) ha propuesto una nueva clasificación para la prostatitis (infección de la próstata):
Ambos, la prostatitis bacteriana aguda y crónica son reconocidos por la presencia de una infección bacteriana en la glándula de la próstata. Por lo tanto, el tratamiento de la prostatitis es variable y realmente depende principalmente del tipo y la causa de la prostatitis.
Normalmente, el tratamiento bacteriano agudo y crónico es con antibióticos. En casos graves, el paciente recibirá las inyecciones intravenosas de antibióticos en el hospital. Tras caso mejora, curso de antibióticos orales proseguirá por 14-30 días para evitar recaídas. Principalmente, la duración del curso de antibióticos para la prostatitis bacteriana crónica es más larga que la prostatitis bacteriana aguda; se puede repetir varias veces así.
Si usted padece de prostatitis bacteriana aguda, su médico le aconseje tomar tetraciclina, trimetoprima-sulfametoxazol (TMP-SMX) o drogas quinolonas.
Los antibióticos comunes utilizados para el tratamiento de la prostatitis bacteriana aguda son:
Trimethoprim-sulfamethoxazole(TMP-SMX).
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